Ponente
Tony Meléndez
José Antonio Meléndez Rodríguez, más conocido como Tony Meléndez (Rivas, 9 de enero de 1962) es un guitarrista, compositor y cantante nicaragüense. Célebre por su habilidad al tocar la guitarra con los pies. Un medicamento recetado por orden médica a su madre durante el embarazo, el medicamento se llama Talidomida, debía calmar los efectos de náusea del primer semestre de embarazo, pero sus efectos dejaron graves consecuencias: al igual que a él, el fármaco provocó que miles de niños nacieran con deformidades, sin brazos, sin pies.
Debido a las precarias condiciones de salud que existían en los países centroamericanos en los años sesenta, la familia Meléndez decide trasladarse a los Estados Unidos de América. Durante muchos años la familia tuvo que acomodarse a una forma de vivir con ciertas limitaciones materiales.
Tony jugó fútbol (soccer) en la secundaria de Chino, no tuvo limitaciones durante sus estudios secundarios, y detestaba sus brazos artificiales, los cuales, más de algunas vez, fueron a parar en un cubo de la basura. Está casado, su esposa y sus dos hijos son su mayor inspiración.
Fue su padre quien le dio sus primeras lecciones de guitarra y aquella vieja guitarra española que perteneció a su progenitor es uno de sus más preciados tesoros.
Hasta el día de hoy radica en los Estados Unidos, en la ciudad de Branson MO, llevando una ocupada agenda de conciertos y charlas motivacionales que han sido acompañadas de la redacción de un libro: "A Gift Of Hope" ("Un regalo de esperanza"), escrito en inglés, hoy traducido al castellano.
Es famosa su interpretación ante 6.000 jóvenes en el Universal Amphitheater de Los Ángeles el 15 de septiembre de 1987, para el Papa Juan Pablo II. Después de que Tony terminara de interpretar el tema Never be the same, el Papa sorpresivamente saltó del escenario, se acercó a la plataforma donde se encontraba lo besó y lo felicitó.
Las palabras del Papa fueron las siguientes: «Tony, eres verdaderamente un joven muy valiente. Estás dando esperanza a todos nosotros. Mi deseo para ti, es que continúes dando esperanza a todo el mundo».
Escribió también un libro titulado No me digas que no Puedes.